Bajo el lema “Madre, danos amor para caminar con esperanza” más de dos millones de fieles caminaron los 60 kilómetros hasta la Basílica de Luján, en una de las ediciones más multitudinarias de los últimos años.
Durante el fin de semana, Luján volvió a convertirse en el punto de encuentro de millones de peregrinos provenientes de todo el país, que llegaron movidos por la fe, la esperanza y la devoción de la Patrona del pueblo argentino.
La columna principal, encabezada por la Imagen Peregrina, partió el sábado desde el Santuario San Cayetano en Liniers y recorrió más de 60 kilómetros bajo un intenso calor. Ya en la madrugada del domingo, la lluvia marcó el tramo final del camino y acompañó el ingreso de los fieles a la ciudad, generando uno de los momentos más emotivos de la jordana.
La misa central se celebró dentro de la Basílica, presidida por el Arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge García Cuerva, quien destacó: “No aflojamos y nos comprometemos a no abandonar los sueños de construir un país más justo y más fraterno. La madre de Argentina nos impulsa a continuar el camino unidos, con misericordia y esperanza”
Más de 60 puestos sanitarios y 5.500 voluntarios asistieron a los peregrinos durante el recorrido, en un trabajo articulado entre la Comisión Arquidiocesana de Piedad Popular, el Municipio de Luján, organismos provinciales y equipo de Salud, Seguridad y Defensa Civil.
Además, desde el Municipio se desplegó un operativo integral de tránsito y limpieza, con 150 trabajadores municipales, camiones compactadores y puntos verdes para mantener limpia la ciudad y acompañar la llegada masiva de fieles.
Celebrada ininterrumpidamente desde 1975, la Peregrinación Juvenil a Luján reafirma su lugar como una de las expresiones de fe más profundas del país, donde millones de personas caminan cada año unidos por la esperanza.
